La Gloriosa Revolución inglesa de 1688 no solo produjo el Banco de Inglaterra, el cual todavía hoy es el Banco Central de la Gran Bretaña, sino que también introdujo la actual familia real de Inglaterra: la Casa de Windsor. La Casa de Windsor desciende directamente de la familia real del Hannover alemán, la cual tenía lazos íntimos con la Casa de Orange y otros principados alemanes del mismo estilo de la camarilla de matrimonios tramposos y derrocamientos. Después de la muerte de Guillermo III de Inglaterra, su hermana Ana fue colocada en el trono británico. Por arreglo previo a la muerte de Ana, el trono británico fue renunciado por la familia Orange a favor de los gobernantes del estado alemán de Hannover, quienes ya habían emparentado familiares previamente dentro de la familia Estuardo británica.
El Primer Elector, Duque Ernesto Augusto (1629-1698), se había casado con una nieta del rey James I de Inglaterra, Como fue cierto con la Casa de Orange, las nupcias de hannoverianos con la familia Estuardo no titulaban legalmente a cualquiera de los hannoverianos para subir al trono británico, pero con el derrocamiento de James II por los Whigs a la Casa de Orange, las reglas fueron cambiadas para conveniencia de los vencedores.
El primer rey hannoveriano en tomar el trono británico fue Jorge Luis, quien se convirtió en Jorge I de Inglaterra. Jorge I no hablaba inglés y veía a Inglaterra como una posesión temporal. El continuaba dedicando la mayor parte de su atención y cuidado a su lar alemán. A medida que las generaciones hannoverianas ascendían al trono británico se iban convirtiendo y arraigando permanentemente en la sociedad británica. Los hannoverianos proporcionaron a Inglaterra todos sus monarcas hasta 1901, y los descendientes hannoverianos del ala de la reina Victoria han suministrado el resto hasta el día de hoy.
Durante todo este tiempo, la dinastía continuó sosteniendo fuertes lazos con otras familias nobles alemanas. Durante el primer siglo y medio de gobierno hannoveriano en Inglaterra, por ejemplo, los reyes hannoverianos británicos sólo se casaron con las hijas de otras familias reales alemanas.
No es una sorpresa que existiese una oposición general en Inglaterra contra los hannoverianos después de que lograron el poder real. Comprensiblemente, muchos ingleses sintieron que los monarcas alemanes no tenían porqué inmiscuirse reinando sobre súbditos británicos. Las facciones anti-hannoverianas buscaban poner a los Estuardo de regreso en el trono de Inglaterra. Debido a esto, los hannoverianos decidieron no permitir la formación de un gran ejército de bretones nativos, temiendo que ellos pudieran dar un golpe. En su lugar, cuando los ingleses necesitaban soldados en gran número, los hannoverianos usaban el dinero del tesoro británico para alquilar mercenarios de sus amigos alemanes y de su propio principado de Hannover, pagando cuantiosos honorarios.
El mayor número de mercenarios fue proporcionado por la familia real de Hesse, la cual tenía estrechos y cerrados lazos amistosos con la Casa de Hannover alemana. Un aspecto curioso del arreglo con los mercenarios fue que algunos miembros de las más importantes de esas familias alemanas, especialmente la de Hesse, surgieron más adelante como los líderes de un nuevo tipo de francmasonería que se había creado para derribar a los hannoverianos del trono inglés.
Antes de estudiar esta extraordinaria situación, buscaremos ver cómo estaba desenvolviéndose la masonería en estos tiempos. Los cambios mayores se estaban desarrollando e iban a hacer de la masonería la rama más grande de la Hermandad.
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