Venezuela y su petroleo

Las reservas petroleras de Venezuela oficializadas recientemente, son las de mayor volumen en el planeta con 296.5 billones de barriles.

Cuando la producción petrolera venezolana era controlada por las transnacionales el volumen de producción llego a situarse en tres millones de barriles diarios. Durante el decenio 1965 – 1975 se muestra un pico de producción de 3.75 millones de barriles diarios (MBD).

En 1985 PDVSA perforaba exitosamente la primera de una serie de estructuras geológicas cuya existencia se sospechaba desde 1950, pero se carecía de la tecnología para perforar a tal profundidad.

Tres factores le permitieron a PDVSA alcanzar, en 1998 una producción de 3.48 MBD:
1.- Los descubrimientos y puesta en producción en Oriente
2.- Campaña de perforación para incremento del bombeo en Occidente
3.- Una política de expansión de barriles en el mercado

Parte de la declinación en la producción petrolera fue influenciada debido a que yacimientos longevos de Occidente daban nuevas muestras de agotamiento.

En 2004 los niveles de producción de PDVSA fueron similares a los de 2002, ubicándose en 2.91 MBD, con ligero repunte en 2004 y 2005 de 2.94 y 2.81 MBD respectivamente, al comenzarse a manejar la transición de las transnacionales a empresas mixtas de capital compartido con PDVSA, como era de esperarse, durante la transición se redujeron sensiblemente las inversiones para incrementar la producción, lo que fue causa parcial de la caída a 2.47 MBD en el 2010.

Desde la instauración de la “nueva” PDVSA la producción ha menguado de 2.91 a 2.47 MBD lo que representa una caída del 15 por ciento en siete años.

CONCLUSION:
La producción petrolera 1965 – 2010 en Venezuela podríamos resumirla en tres ciclos:
El primero con volúmenes sobre los 3 MBD que culmina en 1976.
Un segundo que abarca la caída por la desinversión que produjo la nacionalización, y su repunte con la madurez del personal venezolano sumado a nuevos descubrimientos en Oriente, que la llevaron a 3.48 MBD en 1998.
El tercero, que incluye la declinación de producción en Occidente, el paro petrolero del 2002 y la eliminación de operadoras para formar empresas mixtas hasta el 2010, cuando cerró en 2.47 MBD.