La nula unidad no aceptaba la derrota de Alemania en la I Guerra Mundial y por esto, asesinó algunos de los líderes alemanes que habían negociado la rendición del país.
Un líder prominente del Comando del Distrito fue el Capitán Ernst Rohm. Rohm era soldado profesional que servía de enlace entre el Distrito Comando y los industriales alemanes que estaban dando directamente fondos al Distrito Comando para combatir el comunismo. El Capitán Rohm y muchos otros miembros del Distrito Comando eran miembros de una organización mística conocida como la Sociedad Thule. La Thule creía en la super-raza aria y predicaba la venida de un Mesías alemán que conduciría a Alemania a la gloria y a una nueva civilización aria. En “Spear of Destiny” supimos del Dr. Stein que el grupo de Thule era financiado por algunos de los mismos industriales que apoyaban al Distrito Comando. La Thule era también apoyada directamente por el Alto Comando Alemán.
Muchos de los asesinatos perpetrados por el Distrito Comando, puede que hayan sido inspirados por la Thule. Según el Dr. Stein, la Thule era una “sociedad de asesinos”. Mantenía una corte secreta y condenaba gente a muerte. Es probable que muchas de las víctimas ejecutadas por el Distrito Comando habían sido previamente condenadas en la corte secreta de la Thule. Por ejemplo: el Director de la Policía de Munich, Franz Gurtner era un declarado miembro del círculo más íntimo de la Thule. Posteriormente llego a ser el Ministro de Justicia del III Reich (3a. República).
Después de unirse al Distrito Comando, el caporal Adolfo Hitler se hizo buen amigo de Ernst Rohm. Fue Rohm quien llevó a Hitler a ver a Dietrich Eckart, un adicto a la morfina que encabezaba la Sociedad Thule Alemana. Rohm tenía un propósito arreglando esta reunión. El sentía que Hitler poseía un fuerte potencial de liderazgo y que era el hombre que la Thule estaba buscando. Eckart estuvo de acuerdo y la carrera de Hitler fue lanzada como el nuevo Mesías Alemán.
El vehículo usado por Hitler para ganar poder político fue una pequeña organización socialista conocida como el Partido Alemán de los Trabajadores. En septiembre de 1919, Hitler fue enviado por el Distrito Comando para asistir a un mitin del Partido. Hitler subsecuentemente fue invitado por el Partido a unírsele y en un año se convirtió en el líder del partido.
En una reunión del partido en 1920, realizada en una cervecería de Munich, Hitler anuncio que el
Partido Alemán de los Trabajadores iba a cambiar de nombre por el de Nationalsozialistische Deutsche Arbeiterpartei, o resumiendo: Partido NAZI.
En Mein Kampt, Hitler anuncia que había tomado la grave decisión de abandonar el Distrito Comando con el fin de integrarse al Partido Alemán de los Trabajadores. Muchos historiadores dudan fuertemente que Hitler haya dejado el Distrito Comando, y creen por el contrario que el Partido Alemán de los Trabajadores fue el vehículo usado por el Distrito Comando para encubrir más su brazo político. Hay buena evidencia que soporta esta conclusión. Ernst Rohm, el mentor de Hitler en el Distrito Comando, había ingresado ya y comenzado a formar el Partido Alemán de los Trabajadores antes de que Hitler fuera miembro. Rohm ayudó enormemente a Hitler en la transformación del Partido Alemán de los Trabajadores en un instrumento político de Hitler. Rohm creció con el novato Partido Nazi y más tarde fue el lider de la organización nazi SA, mejor conocida como los “camisas pardas".
El lider de Thule, Dietrich Eckart, quien estaba estrechamente ligado también a los líderes del Distrito Comando, se hizo Jefe de Editores del periódico nazi, Volkischer Beobachter. De ninguna manera Hitler había abandonado a sus amigos del Distrito Comando. Todos ellos estaban trabajando para transformar el Partido Alemán de los Trabajadores en el Partido Nazi.
Eventualmente Rohm perdió su poder político cuando se redujo la SA y la organización SS de Himmler surgió a la supremacía. La utilidad de Rohm para la Sociedad Thule y para el aparato de inteligencia había sobrevivido hasta 1934, cuando oficiales nazis fueron a la casa de Rohm para arrestarlo alegando conspiración para derrocar a su antiguo subalterno: Adolfo Hitler. Rohm fue presuntamente encontrado en su dormitorio en posición comprometedora con uno de sus ayudantes
principales. Se le ofreció la oportunidad de cometer suicidio pero se negó, entonces los nazis lo arrestaron y lo mataron en una prisión de Munich. Es interesante que Rohm no sospechaba el destino que le esperaba debido a que Hitler había viajado a Munich para encontrarlo y escoltarlo personalmente. Hitler era un maestro en el uso de la gente de confianza de otros para engañarlo y hacerlo caer en la trampa, —este fue uno de los métodos usado para enviar a los judíos y otros “indeseables” a la muerte en los campos nazis de trabajo esclavo.
Aunque Thule probablemente fue la más importante organización mística detrás de la formación del nazismo, esta no fue la única. Otra fue la Sociedad Vril, cuyo nombre se derivó de un libro de Lord Bulward Litton, un rosacruz inglés. El libro de Litton relata la historia de una super-raza aria llegando a la Tierra. Uno de los miembros de la Sociedad Vril fue el profesor Karl Haushofer, un antiguo empleado de la inteligencia militar alemana. Haushofer había sido un mentor para Hitler, como también para el especialista en propaganda de Hitler, Rudolph Hess. Hess había sido asistente de Haushofer en la Universidad de Munich. Otro miembro de Vril fue el segundo hombre de más poder en el Partido Nazi, Heinrich Himmler, quien llegó a ser la cabeza de la temida SS y la Gestapo. Himmler incorporó la Sociedad Vril al Bureau Oculto nazi. Otro grupo místico fue la sociedad Edelweiss, el cual predicaba la venida de un “Mesías nórdico”. El dictador financiero nazi, Herman Goering, llegó a ser un miembro activo de la Sociedad Edelweiss en 1921 mientras vivía y trabajaba en Suiza.
Goering creía que Hitler era el “Mesías Nórdico”. El nazismo fue claramente algo más que un movimiento político. Fue una poderosa facción nueva de la Hermandad empapada en sus símbolos y creencias. El emblema escogido para representar al Partido Nazi fue la esvástica, un importante símbolo de la Hermandad desde la antigüedad. Hitler no sólo fue proclamado Mesías político sino también Mesías religioso, cuya venida señalaba la culminación de las filosofías apocalípticas expuestas por los grupos místicos alemanes. La venida de Hitler era para anunciar la República de Mil Años, —un milenio en el cual la humanidad sería purificada y alcanzaría su mayor estado de existencia.