Estos
pronósticos están basados en opiniones y análisis considerados muy importantes
en relación con estimaciones de precios de los bancos de inversión, que
usualmente participan en el mercado energético de diversas formas.
Uno de estos
bancos publico una nota titulada “Nuevo orden petrolero” y predice que los
precios del petróleo se mantendrán en niveles bajos por el resto de la década.
En su exposición la nota dice que tanto la OPEP como los EE UU tienen potencial
para ganar participación en el largo plazo, aún con un WTI (West Texas
Intermediate) entre US$60-US$50 por
barril al final de la década.
Dentro de
las empresas habrá posiblemente fusiones, compras, pues las más fuertes
financieramente podrán adquirir reservas y activos con ventaja. Además la
producción de Lutitas (shale oil) continuará.
La disminución
en la cantidad de taladros en los Estados Unidos se estima en 660, pero se
activará pues estima Goldman Sachs un costo marginal para el “shale” en el
orden de los US$60 por barril.
El WTI
tendría un diferencial con respecto al Brent de US$6 por barril en 2015 y de
US$5 en 2016.
Concluyendo
así Goldman Sachs, con un precio promedio para el Brent en 2015 de US$58 por
barril y de US$52 para el WTI en 2015.
Para 2016/17/18 el precio del WTI seria
de US$57/US$60 respectivamente, y para llevarlo a Brent se le agregan US$5 por
barril.